jueves, 16 de marzo de 2017

Javier Cárdenas - Siéntelo (2004)


Antes de ser el "cuñado de España", un verdadero ídolo de masas con programas en diversos medios a las horas críticas (radio cuando más gente oye la radio, tele cuando más gente ve la tele), Cárdenas era un reportero en Crónicas Marcianas cuyo cometido era, en resumidas cuentas, humillar a gente que no estaba muy en sus cabales. Con una carrera intachable de la que sentirse tan orgulloso, decidió al parecer grabar un LP corto en el que su rostro, que tanto repelús da aún cuando sus proporciones son normales, está completamente deformado por culpa de un uso deplorable del Photoshop. O igual es culpa del que subió la imagen a internet, quién sabe.


La existencia de este álbum llegó a mi conocimiento por un muy buen amigo que sabe que me pirro por este tipo de detritus auditivo, y cuya identidad no voy a revelar por si se abre un litigio o algo debido a esta crítica.

El género musical en el que se podría circunscribir esta hez es tal vez el dodecafonismo, debido a que Cárdenas no da dos notas iguales. Es una música en teoría dance, pero si algún día bailas con esto es el resultado de muchas decisiones equivocadas, la primera de ellas posiblemente el satanismo.

Por lo demás es indistinguible de alguien como Tamara/Yurena/Ámbar. Para alguien que se rige por su sentido común, "Siéntelo" es un descalabro de proporciones artúricas. Este tema es pachanga discotequera, credits theme de un OVA fanmade de una serie de hentai, y triunfitismo eurovisivo trasnochado, todo en uno. No tengo los créditos disponibles porque lo estoy escuchando en Spotify, pero si los compositores de esta canción no son Leonardo Dantés, Boris Izaguirre y Reverte, que me caiga un rayo aquí mismo. El juicioso autotune que cierra la canción debería haberse aplicado con más ímpetu en el resto de las pistas vocales. ¿Y si Cárdenas presentara "Levántate" con autotune? ¿Sería peor? Yo creo que no.

"Ya No Hay Salida" es rumba tocada por Alaska con colaboración especial de Korn, y como tal merece un aplauso. Las letras son lo suficientemente vacuas como para no merecer especial atención, pero el tema podría ser el tema número 1 en el desfile del Orgullo Gay cualquier año de estos. No sé si eso le gustaría a Cárdenas, por otra parte, pero eso es un motivo más para hacerlo. Cuentan que Fangoria escuchó este disco y decidió pasarse al country sureño.

Por desgracia, Cárdenas volvió a ganarles el terreno, porque "Tantos Recuerdos" es exactamente eso. Una canción dominada por el pedal steel y lo que parecen cuerdas de sintetizador. Esta balada también goza de un solo de saxofón infernal que no viene a cuento de nada y que por ello también parece haber sido una influencia inconsciente en los famosos Gangrena.

Ante tanto quiebro y requiebro musical, dignos del Cordobés, "Te Dejé Escapar", es de lo más predecible. Las canciones parecen tener la intención de postergar la intervención vocal del locutor lo más posible: aquí no entra hasta el segundo 50, con sus banalidades de costumbre y su entonación sui géneris. Como prodigio que es, se hace los coros a si mismo, quizá porque todo el mundo se negó a hacerlo. En determinado momento, o bien por un efecto desmedido o porque se tragó el micrófono, se entrecorta la grabación al decir la palabra "contro-o-o-o-o-ol". Su productor probablemente no tenía ningún cariño por la vida.

"Vivo en Silencio". Ojalá. Backstreetboysiana en su estructura, más bien UPAdanceiana en su ejecución, es casi decente. Hay un moment en que parece que Cárdenas está ahogándose, pero puede deberse a que los niveles del sonido están en la parra. E imagino que todas las voces del fondo son Cárdenas. Cárdenas everywhere. "Me Persigue el tiempo" es más synthpop, minimalista casi. Si no la cantara Cárdenas, y no la produjera Paco Porras, igual sería hasta algo potable. Cierto que el estribillo no lo interpreta nuestro artista, ni tampoco el puente. Imagino que tenía que ir a echar un meo o algo y acabaron la canción sin él. No creo que esperaran que nadie llegara hasta esta canción, y mucho menos que la razón de que siguieran escuchando fuera la voz de ese sujeto. Pero bueno.

Por algún momento, el disco ha degenerado en el boybandismo absoluto. "Cara a Cara" empieza con palabras en swahili, o algo así, y prosigue sin mayor importancia.

Es un disco corto, lo que es de agradecer. Para más inri, los dos últimos temas son reworkings de otros ya mencionados. Un remix trompetístico de "Tantos Recuerdos", que tiene a un tío muy irritante diciendo "YOP" cada compás, y una versión EN INGLÉS INVENTAO de "Ya No Hay Salida" que ahora se llama "Rainy Day" because yes. Las he escuchado más por obsesión que por otra cosa.

VALORACIÓN: Ni siquiera es el peor disco que se ha reseñado en esta página, pero es con diferencia el más ofensivo y el que menos necesidad tiene de existir. Levantar la tapa. ¿Casualidad?

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