martes, 15 de noviembre de 2016

Mike Goldman - María (2000)


Bueno, soy lo suficientemente humilde como para saber cuándo estoy en presencia de la verdadera grandeza.Y Mike Goldman, con esa pose tan natural, con la mano en la nuca como si se estuviera autoadministrando una colleja, y esa especie de caftán de ante que tan de moda está ahora en los barrios más chic de Milán, es muy grande. Mike Goldman, cuyo verdadero nombre será Miguel Del Oro, o algo por el estilo, que decidió adoptar un apellido judío para así convencer a los magnates de la industria musical de lanzar su disco.

De hecho, en todas las fotos del álbum parece que se esté intentando hacer daño: la contraportada le presenta propinándose un puñetazo, y en el libreto aparece estrangulándose mientras sujeta el micro, sugerente. Pero quién soy yo para hablar de sadomasoquismo, al fin y al cabo he comprado este álbum.


Podemos ver que un tal Samy Valente ha sido el compositor, arreglista, productor, director y corista de la mayor parte del disco, una especie de Tommy Wiseau de la bachata. Así nos lo refleja Mike Goldman, el autodenominado "gordito de oro", en los agradecimientos. En ellos también podemos descubrir que este álbum es conceptual, girando en torno a María, la novia de Mike. De hecho este es el último párrafo íntegro y sin censura:

Y doy gracias a Dios por darme una familia maravillosa, y en especial un padre y una madre que sin ellos no sería nada de lo que soy ahora, a mi novia María que ha sido inspiración en mi producción y a toda la gente buena que me ha apoyado les quiero y espero que les guste y a bailarrrrrrrrrrrr.
Es un joven lleno de entusiasmo, no me cabe la menor duda.

El disco se abre con el tema homónimo, y desde los primeros compases podemos ver que la sangre latina corre por las venas de esta música. Con un casiotone de libro imitando el graznido de una trompeta digno del peor grupo de hotel de la Costa Blanca, tenemos el marco perfecto para el que creo será el verdadero protagonista de este álbum: Mike Goldman.

La voz de Mike está llena de matices: tiene un poco de quejido de ranchera, una tizna del mejor Chayanne, y ciertos matices de macho de telenovela. Es difícil escuchar este "María" sin pensar en una clase de jubiladas haciendo aquagym en una piscina superpoblada. Y así y todo, es peligrosamente adictivo. Es como si Mike hubiera acaparado el micrófono en una fiesta a la que no había sido invitado y hubiera aprovechado la oportunidad para declararse a su crush. Es tan entrañable, incluso el momento en el que gime "Sí. Soy yo. Mike Goldman. Tu gordito de oro, mamá". La canción dura varias horas más de lo necesario, pero se perdona porque ese tiempo se emplea en repetir la frase anterior.

GORDITO DE ORO COUNTER: 2

"Se me quema el cuerpo" vuelve a incluir el apelativo de "gordito de oro", que supongo que será su manera de vengarse de todos los abusones que le insultaron en el colegio, lo cual es inspirador. Luego gime otra vez, porque se quema. Este realismo atroz sin duda añade a la canción, una tonada charanga-punk con unos coros insistentes sobre el estado ardiente de la anatomía del señor Goldman, que sigue contorsionándose de dolor. Lo que es la letra es bastante minimalista, pero parece tratar sobre una ola de calor y... ¿en serio va a repetir lo del "gordito de oro" cada dos minutos? Es una de las cosas más irritantes que he oído en mi carrera crítica.

GORDITO DE ORO COUNTER: 5

Hasta ahora la historia es que Mike tiene una novia con la que se va a la playa para combatir la temperatura, y nuestro siguiente capítulo se llama "Me pica el twi", imagino que por la arena colándose por sitios insospechados. Sólo hay una manera de librarse de ella: el baile del twi, que al parecer por los interjecciones de nuestro intérprete consiste en rascarse frenéticamente su anatomía mientras insultas a las mujeres que no están interesadas sexualmente en tu persona. Lo veo petándolo en los guateques, ciertamente. Lo que no está muy claro es qué apéndice es exactamente el twi, ¿pero acaso importa?

A la mitad Mike empieza a gruñir como una urraca, por motivos que no quedan claros, antes de hacer el clásico repaso a la geografía hispanohablante que todo buen artista latino debe incluir en al menos el 20% por ciento de las canciones para recibir subvenciones del Instituto Cervantes.

GORDITO DE ORO COUNTER: 7

"Tizana" se interna en el mundo de la IDM más extravagante, con polirritmos y orchestral hits para dar y regalar. ¿Recordáis el fragmento rap de "Muero de amor" de los Eclipse? Pues es esta canción, solo que aquí Goldman pone voz de Louis Armstrong jugando a las preguntas y respuestas con su coro. Es una canción sorprendente, porque sin comerlo ni beberlo, empieza a gritar "¡CEREBRO! ¡CEREBRO!". Al parecer la tizana, dice Wikipedia, es una especie de ponche de frutas venezolano muy adecuado para niños, deportistas y mujeres embarazadas, y no estoy seguro de en cuál de esas categorías encaja Mike Goldman.

GORDITO DE ORO COUNTER: 8

El siguiente tema, "Esta noche es mía", con sus timbales y silbatos recordando al carnaval de Río, es uno de los más bailongos, muy en la vena de "Follow the leader" y otros clásicos. Hay una voz grave ininteligible que podría ser un homenaje a David Bowie o a Carmen de Mairena. La letra es por supuesto genial: "esta noche es un derroche/en mi casa dejo el coche". Todos los elementos de la canción se repiten unas doscientas veces, lo que la convierten en pegadiza por aplastamiento.

GORDITO DE ORO COUNTER: 9

Este es Mike Goldman, bachateando. La bachata es el equivalente latino a lo que es la balada de toda la vida. En este caso tenemos un reprise del María que daba inicio al álbum, pero producido con el esfínter. Hay una cantidad de ruido y distorsión en la grabación que de hecho convierten a Mike Goldman en un pionero del latin lo-fi, un género que no existía hasta este momento, que yo sepa. Por suerte, "María" es con mucho la mejor canción del disco.

Lo cual me lleva a reflexionar, porque si creemos en lo que dicen los créditos, es la única canción que de hecho está compuesta por Goldman. ¿Sería este álbum un clásico si el cantante hubiera decidido ser cantautor? Porque estructuralmente, "María" es muy decente, mientras que el resto de temas son diarrea aleatoria con berridos y muletillas repetidas hasta la saciedad. Y aquí ni siquiera dice lo del gordito de oro (si bien sí que nos recuerda su nombre un par de veces).

GORDITO DE ORO COUNTER: 9

Claro, luego llega un oligofrénico gritando "SE MUEVE COMO CULEBRA YEEEEEEEEEEEEEEEH", en plan afrocubano, y se pierde la magia. Es "Palo Hause", que no tengo ni idea de qué significa. Este tema podría encajar perfectamente en el "Graceland" de Paul Simon, es así de excelente. No entiendo nada de lo que está diciendo, salvo cuando increpa a quien quiera que le esté acompañando a "deshuesarse" para, imagino, "moverse como culebra".

GORDITO DE ORO COUNTER: 11

A continuación viene "Me pilla la poli". Me gusta el título porque no es "Me persigue la poli", o "Me busca la poli": Mike sabe perfectamente que, si la poli quiere cogerle, él no tiene ninguna posibilidad de escapar. Lo ha asumido, y eso le honra. Aderezada con unas sirenas y ese insistente ritmo pachanguero que he aprendido a aborrecer, tiene un estribillo digno de Tito MC: "te pilla la poli, la poli te pilla". El tema también incluye un bonito mensaje anti-violencia de género, que desea el encarcelamiento de los sexistas. Mensaje que por otra parte contrasta con eso de "las mujeres que no me quieren son escoria" de "Me pica el twi", pero bueno.

GORDITO DE ORO COUNTER: 13

La bachata vuelve con "Si tú te vas", un tema en el que promete mucho más sentimiento, el cuál va a transmitir mediante susurros sensuales y bastante mal afinados. Es otro tema que choca mucho con el sonido general del álbum, de nuevo por estar compuesto por alguien que no es Samy Valente, en este caso un tal "DR", quizá el endocrino personal de Goldman.

GORDITO DE ORO COUNTER: 13

Como es obvio, después de la calma siempre llega la tormenta, en este caso en forma de "Mixeo" de "Me pica el twi", la canción más horrible del disco y quizá de la música latina en general. Remezclada al parecer por alguien que acaba de descubrir el botón de loop del Virtual DJ y que no tiene ningún sentido de la magnitud, consiste en una repetición íntegra de "Me pica el twi" solo que en intervalos aleatorios se repiten cachos de la canción un número igualmente indefinido de veces. Es algo que yo he hecho y que es entretenido, pero que jamás se me ocurriría enseñárselo a nadie, mucho menos publicarlo en un CD que, según parece, fue distribuido en Estados Unidos y seguramente comprado en masa. Parecía imposible empeorar la canción, pero sabe Dios que lo han conseguido.

GORDITO DE ORO COUNTER: 14

En resumidas cuentas, el gordito de oro no es lo peor por sí mismo, pero su mentor y productor Samy Valente ha conseguido que su no demasiado agraciada voz resulte absolutamente vomitiva cantando algunos de los temas más repetitivos y estúpidos que he tenido la mala suerte de regalar a mís oídos. Pero la portada equilibra todos los puntos flacos del disco. No le llaman el gordito de oro por nada.

VALORACIÓN: Levanto la tapa porque es infumable, aunque he cogido cariño al bueno de Mike.

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